Javier de Cominges, de Zeres Abogados, detalla en unas declaraciones en El Independiente por qué los padres pueden ahora solicitar el complemento de maternidad para la pensión. Una reciente sentencia del Tribunal Supremo ha aclarado la cuestión y ha dictaminado que no prescribe el derecho a solicitar dicho suplemento, que estuvo en vigor entre 2016 y 2021.
El fallo de la Sala de lo Social, del 21 de febrero de 2024, concluye que la ley española discriminó a los varones, no ya por no permitirles el acceso al mencionado complemento, sino por no justificar adecuadamente que se trataba de una discriminación positiva para intentar corregir la brecha de género. Inicialmente, este complemento por aportación demográfica, solo podían percibirlo las mujeres hasta que una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) de diciembre de 2019 declaró que también debían cobrarlo los varones porque lo contrario era “discriminatorio”.
De Cominges, especialista en derecho laboral, explica que «la cuestión es que la ley fue un fallo del legislador, que tenía en mente cubrir la brecha de género, es decir, una discriminación positiva para intentar corregir una desigualdad material que existe. Y sí, la ley permite discriminar a alguien, es algo que se puede y se debe hacer, pero cumpliendo una serie de principios, pasando por una serie de filtros… y el TJUE dice que en la exposición de motivos no se dice eso, y que por tanto la ley discrimina al hombre».
Ahora, tras el último fallo del Alto Tribunal, cientos de padres a los que se les había denegado, pueden reclamar tanto el complemento como la indemnización aparejada. «Porque la Administración ha quedado obligada a reparar el daño ya que está obligada a cumplir con una sentencia europea y no lo ha hecho», subraya De Cominges, «y ahora esto abre la puerta a que padres que no hubieran reclamado la indemnización ahora sí puedan pedirla».
Sobre cuánto va a tener que abonar la Seguridad Social, cuantía que dependerá del número de afectados que lo soliciten ahora, De Cominges señala que «Para mí lo importante ya no es solo el coste que van a suponer los complementos no pagados, sino también el coste que ha tenido a nivel de la Administración de justicia, el gasto a nivel funcionarial…»
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